Hoy Leemos… en Conde Duque!

Me salen muchas palabras para definir este segundo «enCuento» #hoyleemos, pero me vais a permitir que os cuente que la que más significado cobró durante toda la organización fue «Incertidumbre». Esta era la primera vez que organizaba un evento sin lista de confirmados, sin invitaciones enviadas, sin un aforo «controlable», y tuve que confiar en que la difusión que se hizo a través de Malakids!, del Centro Cultural Conde Duque y de mi blog y redes sociales fuera suficiente para que la gente se enterara y se animara!

Desde primera hora de la mañana estuve por allí ultimando detalles, y cuando vi los cuentos colocados, los cojines y sillas en su sitio, y los carteles colgados sólo pensaba «Ahora sólo falta la gente!» y sí! 15 minutos antes de la hora comenzaron a llegar las primeras familias, y yo empecé a respirar tranquila casi a la vez 😉

El evento comenzó  con las fantásticas chicas de Froggies pintando las caritas de todos los niños que entraban por la puerta. En pocos minutos la sala se llenó de héroes, leones, princesas, jirafitas, y un sin fin de personajes! Los peques estaban más que encantados con sus nuevas identidades, la primera Martina!

Después de una mini presentación en la que conté un poco el origen del hashtag #hoyleemos y el motivo del encuentro, los papás pudieron disfrutar del magnífico taller de «Sintiendo los cuentos» que impartió Cristina Saraldi, en el que hubo muchos juegos y risas pero también momentos en los que los padres escuchaban atentos a los trucos de Cristina.

Mientras los papás atendían a Cristina, los pequeños se quedaban totalmente boquiabiertos con los cuentos de Paloma Balandis. Fue una gozada ver a los padres tan participativos en el taller y a pocos pasos a todos los niños hipnotizados por las historias mágicas que contaba Paloma, que además iba con su preciosa bebé porteada, ¿no os parece maravilloso?

Hubo un momento en que llegamos al límite de aforo, y reconozco que me sentí algo abrumada y también agobiada por si todos se sentirían cómodos a pesar de estar tan lleno. Fue toda una sorpresa el recibir a tantísima gente, y comprobar cómo cada vez más los padres se preocupan y se involucran en actividades para incentivar la lectura en sus hijos.

En esta segunda edición tuve la suerte de contar con las chicas de Creciendo Juntos que contaron y signaron varios cuentos, dejando a los niños totalmente alucinados e involucrándoles para que ellos pudieran también contar historias con sus manos. Fue muy emocionante ver como aplaudían moviendo las manos en alto! Esta preciosa iniciativa de cuenta/signa cuentos para personas con discapacidad auditiva cautivó a pequeños y mayores, y fue verdaderamente especial.

Para finalizar, mi querida Irene, editora de Lata de Sal, vino con su traje de «gata amarilla» a contar el precioso «Gato rojo, gato azul» y a conquistar a todos con su manera de contar historias. Si estáis en Madrid no os la podéis perder contando. Toda la programación de eventos la podéis encontrar aquí.

El rincón lector también tuvo mucho éxito! Hubo una representación de títulos y novedades de Bruño, Combel, Mil Razones, Picarona, La Fragatina, Kalandraka, Blackie Books, Blume, Lata de Sal, Canica Books, y también de los cuentos personalizados de Fabuloos Dreams que los niños pudieron ver, tocar y leer comodamente en los súper cojines que había, y los padres pudieron conocer de primera mano cuentos estupendos y compartir lecturas con sus hijos.

Desde aquí agradecer a las editoriales la cesión de estos ejemplares y os anuncio que durante unas semanas, tanto el blog como mis redes sociales estarán plagadas de sorteos de estos ejemplares. Mañana lanzo el primero de ellos, ¡estad atentos!

Y más gracias a Conde Duque por acogernos y confiar en el proyecto, a Malakids! por incluir el encuentro en su programación, a Cristina, Paloma, Sara, Elena e Irene por dejarse liar, y a Paula, de Fotografía de un momento, que vino con su cámara a sacar todas estas preciosas fotos para que yo no tuviera que preocuparme de hacerlas. Fue un placer ver a tanta cara conocida que se acercó al encuentro, y también a muchas que se presentaron con sus nombre instagrameros y que pude «desvirtualizar». Lo pasé fenomenal y me encantó formar parte una vez más de esta gran familia apasionada por la literatura infantil. Gracias de corazón a todos, y ¡a seguir leyendo juntos!